Caigo en la cuenta de que un año tras año me veo escribiendo mi crónica sobre los Talleres de Verano de Subflash, y que siempre empiezo las líneas con las mismas palabras. Pero es que la sensación de haberlo vivido otra vez es especial y saber que formo parte de ello me enorgullece y emociona a partes iguales.
Porque un año más se han celebrado los Talleres de Verano de Subflash que lo llevan haciendo desde 2003; y un año más me vengo con la cabeza llena de ideas, la bolsa llena de herramientas por probar y el – perdonadme si suena cursi – corazón lleno de alegrías. Mientras dura, aprovechas cada minuto, cada aparte, o cada oportunidad en no quedarte sin hablar con todos; en guardarte una poca de la energía vital, del conocimiento y de la experiencia de todos los que año tras año (o de edición tras edición) han formado parte de esto.
Subflash 2017
La edición de este año tuvo lugar en Murcia los días 1, 2 y 3 de Septiembre; y se ha celebrado en el Hotel Agalia, donde nos han tratado de forma impresionante. Las instalaciones eran una pasada y en mi caso que por circunstancias de la vida debía llevar una alimentación especial, ha superado todas las expectativas. Y qué decir de las charlas… Desde la rueda de presentaciones, pasando por el debate remember sobre los años de la hegemonía de Flash; las charlas de nivel de los ponentes y el taller de herramientas del domingo; han sido, sin duda, algo que ni en los mejores másters o cursos de postgrado podrás encontrar. Y lo mejor: pasar tiempo con un grupo de gente, que tiene en común las ganas de aprender, y compartir a partes iguales. Que dicho sea de paso, hoy día no es muy común.
Este año no voy a detallaros los pormenores de las charlas, os contaré que Orestes Carracero nos dio una charla sobre el Internet de las Cosas, jugamos con cacharritos como arduino y raspberry pi; y que Iván Gajate y Fede Rivas nos hablaron de la muerte del server y del desrrollo de aplicaciones con Firebase. Que el domingo tuvimos una charla colectiva donde cada uno aportó herramientas que nos hacen la vida fácil en el mundo del diseño y el desarrollo; y que también tuvimos un debate-remeber sobre los años de la explosión de Flash y las intros animadas.
Quiero agradecer a Marcos González la labor de organización – por mucho que te empeñes en tumbar el evento, cada año es más espectacular… – Y contaros que en la edición del año que viene (ya van quedando pocas para cerrar el círculo) lo mismo nos vamos a tierras extremeñas. Todo se andará.